viernes, 30 de abril de 2010

EL ESTADO (DEFINICIÓN Y CARACTERÍSTICAS)

¨A la República sólo ha de salvarla pensar en grande, sacudirse de lo pequeño y proyectar hacia lo porvenir¨ (José Ortega y Gasset)¨

¨Uno pertenece a un lugar, a una historia, a un idioma, y yo creo que esa es la Patria¨ (Saramago)

Para Weber, el Estado es ¨aquella comunidad humana que en el interior de un determinado territorio, reclama para sí (con éxito) el monopolio de la coacción física legítima. Así pues, para que subsista, es menester que los hombres dominados se sometan a la autoridad de los que dominan en cada caso. Cuándo y por qué lo hagan, sólo puede comprenderse cuando se conocen los motivos internos de justificación y los medios externos en los que la dominación se apoya¨ (citado por Monsalve S., Alfonso, p.16).

Según Barry Buzan (Monsalve S, Alfonso), ¨ Un Estado comporta tres elementos entrelazados: a) la idea de Estado (su historia, tradiciones, cultura, nacionalidad), b) las bases físicas del Estado (el territorio, población, recursos, riqueza) y c) su expresión institucional (ordenamiento jurídico político) ¨

El Estado moderno, resultado del desarrollo del capitalismo en Occidente, es la forma más racional del ejercicio del poder. En la medida en que responde a las exigencias y funcionalidades del capitalismo, el Estado se caracteriza por el monopolio del cobro de impuestos y porque se monta en un derecho que instituye una administración burocrática eficaz, pues produce precisión, disciplina, rigidez, seguridad y calculabilidad, apoyadas por el principio de ¨ constancia en el acta, la jerarquía y la división del trabajo¨

El monopolio de la coacción legítima es la soberanía, entendida como soberanía interna, cuando se refiere al monopolio del ejercicio del derecho y de la coerción por parte del Estado en su territorio y como soberanía externa, referida a la idea de que un Estado no está sujeto a la autoridad de otros Estados u organismos internacionales, respecto a sus relaciones con éstos y respecto a la capacidad de fijar sus propias políticas internas, sin la interferencia de esos otros Estados u organismos.

La soberanía debe distinguirse de la autonomía del Estado, que es la capacidad real que tiene éste de manejar y controlar sus asuntos internos. De hecho, un Estado pierde autonomía sin perder soberanía, aunque en muchas ocasiones ocurran las dos cosas. Así por ejemplo, los países del Tercer Mundo ven recortada su autonomía, cuando negocian con el Fondo Monetario Internacional un ajuste económico, aunque, estrictamente hablando, no pierdan soberanía si los acuerdos con éste son aprobados mediante los mecanismos institucionales establecidos para tales efectos. ¨ (p.17)

El Concepto de Legitimidad: A nivel interno, la legitimidad se articula en un doble sentido: a) la aceptación, sentido que va del individuo al sistema y que se expresa en la participación y/o el respaldo de los gobernados a su sistema de gobierno, en primer lugar y de manera decisiva, a través de la forma como se genera y transmite el poder de los gobernantes; esta clase de legitimidad se denominará, siguiendo a Rousseau, ¨legitimidad de origen¨, pues e s la fuente legítima para el ejercicio de la autoridad; b) ¨legitimidad de desempeño¨, que va del Estado al individuo, y tiene que ver con la manera como se articulan los valores compartidos en las instituciones, el gobierno y el Estado, para cumplir con la función de gobernar.¨(p.20).

Los conflictos internos son actualmente, la mayor amenaza para la supervivencia de un Estado. Por ello es importante mirar desde una perspectiva estructural en qué consiste la fortaleza y la debilidad de un Estado y sacar las consecuencias necesarias sobre ello.

La fortaleza de un Estado, distinta a la fuerza en el terreno militar de una gran potencia, y que tiene que ver con las condiciones intrínsecas que hacen que un Estado, en cuanto tal, pueda existir de la mejor manera: ¨La fortaleza de un Estado, para nuestros propósitos analíticos, no se mide en términos militares. Reside, más bien, en la capacidad del Estado para obtener lealtad –el derecho a gobernar- para extraer los recursos necesarios para gobernar y proveer servicios, para mantener ese elemento esencial de soberanía, el monopolio sobre el uso legítimo de la fuerza dentro de los límites territoriales definidos, y operar dentro del contexto de una comunidad política basada en el consenso¨ (p.40).

La característica central de un Estado débil, será la incapacidad para convocar la lealtad de sus ciudadanos para con el ordenamiento jurídico-político, es decir, la carencia de legitimidad vertical o de origen. Por eso un régimen totalitario o dictatorial, basado en la opresión y la represión sistemáticas, a pesar de su demostración de fuerza, es un Estado débil.

El no poseer el monopolio legítimo de la fuerza en todo el territorio es una sea señal de debilidad.

Un Estado es débil si sus fronteras no están establecidas adecuadamente o si no es reconocido por la comunidad internacional. La carencia de reconocimiento internacional es fuente de deterioro de la fortaleza de un Estado, porque éste será aislado de la comunidad de naciones y considerado como un Estado paria (tal como ocurrió con Irak, o con Yugoslavia en la guerra del Kosovo).

Otro concepto, es el concepto de Estado desestructurado (colapsado), en donde ¨la policía, el poder judicial y otros órganos que sirven para mantener la ley y el orden han dejado de existir o no tienen ya la capacidad de funcionar. En muchos casos se usan para fines diferentes a aquellos para los que se crearon¨ (p.46)

miércoles, 28 de abril de 2010

Continuación Modos de Producción

EL MERCANTILISMO:

El mercantilismo es una doctrina de pensamiento económico que prevaleció en Europa durante los siglos XVI, XVII y XVIII y que promulgaba que el Estado debe ejercer un férreo control sobre la industria y el comercio para aumentar el poder de la nación al lograr que las exportaciones superen en valor a las importaciones.

El mercantilismo no era en realidad una doctrina formal y consistente, sino un conjunto de firmes creencias, entre las que cabe destacar la idea de que era preferible exportar a terceros que importar bienes o comerciar dentro del propio país; la convicción de que la riqueza de una nación depende sobre todo de la acumulación de oro y plata; y el supuesto de que la intervención pública de la economía es justificada si está dirigida a lograr los objetivos anteriores.

Los planteamientos mercantilistas sobre política económica se fueron desarrollando con la aparición de las modernas naciones Estado; se había intentado suprimir las barreras internas al comercio establecidas en la edad media, que permitían cobrar tributo a los bienes con la imposición de aranceles o tarifas en cada ciudad o cada río que atravesaban.

Se fomentó el crecimiento de las industrias porque permitían a los gobiernos obtener ingresos mediante el cobro de impuestos que a su vez les permitían costear los gastos militares.

Así mismo la explotación de las colonias era un método considerado legítimo para obtener metales preciosos y materias primas para sus industrias.

El mercantilismo tuvo gran éxito al estimular el crecimiento de la industria, pero también provocó fuertes reacciones en contra de sus postulados.

La utilización de las colonias como proveedoras de recursos y su exclusión de los circuitos comerciales dieron lugar, entre otras razones, a acontecimientos como la guerra de la Independencia estadounidense, porque los colonos pretendían obtener con libertad su propio bienestar económico.

Al mismo tiempo, las industrias europeas que se habían desarrollado con el sistema mercantilista crecieron lo suficiente como para poder funcionar sin la protección del Estado.

Poco a poco se fue desarrollando la doctrina del librecambio. Los economistas afirmaban que la reglamentación gubernamental sólo se podía justificar si estaba encaminada a asegurar el libre mercado, ya que la riqueza nacional era la suma de todas las riquezas individuales y el bienestar de todos se podía alcanzar con más facilidad si los individuos podían buscar su propio beneficio sin limitaciones.

LIBERALISMO ECONÓMICO:

El Liberalismo es un doctrinario económico, político y hasta filosófico que aboga como premisa principal por el desarrollo de la libertad personal individual y, a partir de ésta, por el progreso de la sociedad.

El desarrollo del liberalismo en un país concreto, desde una perspectiva general, se halla condicionado por el tipo de gobierno con que cuente ese país.

En cuanto a la economía, los liberales han luchado contra los monopolios y las políticas de Estado que han intentado someter la economía a su control.

A pesar de su tendencia crítica hacia Estados Unidos, la tolerancia frente a actitudes políticas diferentes, la disminución de la arbitrariedad gubernativa y las políticas tendentes a promover la felicidad hicieron que el pensamiento liberal ganara poderosos defensores en todo el mundo.

En economía los liberales se oponían a las restricciones sobre el mercado y apoyaban la libertad de las empresas privadas. Pensadores como el estadista John Bright se opusieron a legislaciones que fijaban un máximo a las horas de trabajo basándose en que reducían la libertad y en que la sociedad, y sobre todo la economía, se desarrollaría más cuanto menos regulada estuviera.

Al desarrollarse el capitalismo industrial durante el siglo XIX, el liberalismo económico siguió caracterizado por una actitud negativa hacia la autoridad estatal.

Las clases trabajadoras consideraban que estas ideas protegían los intereses de los grupos económicos más poderosos, en especial de los fabricantes, y que favorecían una política de indiferencia e incluso de brutalidad hacia las clases trabajadoras.

Estas clases, que habían empezado a tener conciencia política y un poder organizado, se orientaron hacia posturas políticas que se preocupaban más de sus necesidades.


A pesar de la transformación en la filosofía liberal a partir de la segunda mitad del siglo XIX, todos los liberales modernos están de acuerdo en que su objetivo común es el aumento de las oportunidades de cada individuo para poder llegar a realizar todo su potencial humano.

El Neoliberalismo:

En un clásico del pensamiento neoliberal "El camino de la servidumbre" Von Hayek define "es la sumisión del hombre a las fuerzas impersonales del mercado la que, en el pasado, hizo posible el desarrollo de una civilización que sin ello no habría podido desarrollarse; es mediante esta sumisión como participamos cotidianamente en la construcción de algo más grande de lo que todos nosotros podemos comprender plenamente" (Von Hayek, 1984).

Políticas principales del neoliberalismo

a. En lo económico

i. Libertad absoluta de mercados: limitando la reglamentación e intervención estatal al mínimo, desregulando los mercados en especial el financiero, e impulsando el abandono de criterios de sustentabilidad ecológica a favor de criterios de rentabilidad.
ii. Privatización y/o liquidación de los servicios y/o monopolios estatales.
iii. Intervención sobre las variables macroeconómicas para evitar déficits presupuestarios y comerciales; reducción de inversiones sociales (salud, educación).
iv. Contención de los salarios en busca de una competitividad internacional y aumentar la tasa de ganancia del capital.
v. Contrarreforma fiscal, aumentando los impuestos indirectos, principalmente sobre el consumo (IVA) y disminuyendo los directos sobre los ingresos altos; promoción de políticas fiscales atractivas para el capital financiero internacional especulativo.
vi. Promoción del comercio orientado hacia las exportaciones.

b. En lo ideológico

i. Mercantilización de derechos y conquistas de los trabajadores; conversión de los mismos en bienes y servicios a ser adquiridos en el mercado. La salud, la educación y el seguro social, dejan de ser derechos indiscutibles de la dimensión humana de los ciudadanos y se convierten en mercancías, al margen de las funciones estatales.
ii. Identificación de lo estatal con todo lo malo, corrupto e ineficiente y al mercado con lo eficiente y bueno.
iii. Desarrolla una esfera del consumo virtual, a través de la televisión fundamentalmente, donde su carácter simbólico no disminuye su capacidad de legitimar al neoliberalismo como sistema de vida y reproducción de las relaciones sociales.


iii. Caracterización como ilusoria, fantasiosa y utópica, a toda opción de organización social diferente y alternativa.

SOCIALISMO DEL SIGLO XXI
(Tomado de Wikipedia)

El socialismo del siglo XXI es un concepto ideado por A.V. Buzgalin en una publicación originalmente en ruso en 1996 y en español en el año 2000. En efecto el primer texto sobre el tema no es el de Heinz Dieterich, sino uno del autor ruso titulado "El Socialismo del siglo XXI" (160 pp., Guanabo, Cuba, Enero 20, 2000). El de Heinz Dieterich Steffan, es posterior, a partir de 1996,1 y muy difundido desde el 30 de enero de 2005, por el Presidente de Venezuela, Hugo Chávez en ese entonces desde el V Foro Social Mundial.
El modelo de Estado socialista del socialismo del siglo XXI es un socialismo revolucionario que bebe directamente de la filosofía y la economía marxista, y que se sustenta en cuatro ejes: el desarrollismo democrático regional, la economía de equivalencias, la democracia participativa y las organizaciones de base. Dieterich, en su obra Socialismo del Siglo XXI se funda en la visión de Karl Marx sobre la dinámica social y la lucha de clases. Dieterich profundiza la teoría marxista y la actualiza en el mundo de hoy, incorporando los avances del conocimiento, las experiencias de los intentos socialistas, develando sus limitaciones, entregando propuestas concretas tanto en la economía política como en la participación democrática de la ciudadanía para construir una sociedad libre de explotación.

Resumiendo, el socialismo del siglo XXI supone que es necesario un reforzamiento radical del poder estatal democráticamente controlado por la sociedad para avanzar el desarrollo.

En el marco de la Revolución Bolivariana, Chávez ha señalado que para llegar a este socialismo habrá una etapa de transición que denomina como Democracia Revolucionaria.

Hugo Chávez expresó “Hemos asumido el compromiso de dirigir la Revolución Bolivariana hacia el socialismo y contribuir a la senda del socialismo, un socialismo del siglo XXI que se basa en la solidaridad, en la fraternidad, en el amor, en la libertad y en la igualdad” en un discurso a mediados de 2006. Además, este socialismo no está predefinido. Más bien, dijo Chávez “debemos transformar el modo de capital y avanzar hacia un nuevo socialismo que se debe construir cada día”.2

sábado, 10 de abril de 2010

SOCIOLOGÍA

LA SOCIOLOGÍA:

Esta disciplina estudia el desarrollo, la estructura y la función de la sociedad.

La sociología se basa en la idea de que los seres humanos no actúan de acuerdo a sus propias decisiones individuales, sino bajo influencias culturales e históricas y según los deseos y expectativas de la comunidad en la que viven. Así, el concepto básico de sociología es la interacción social o la respuesta entre individuos, ya que esta interacción es el punto de partida para cualquier relación en una sociedad.
La base de la estabilidad social, es decir, los valores compartidos por una sociedad, están dados por la moralidad y la religión. Estos valores son los vínculos de cohesión que mantienen el orden social. La desaparición de estos valores conduce a una pérdida de estabilidad social o anomia (sin ley) y a sentimientos de ansiedad e insatisfacción en los individuos (Durkheim).

MODOS DE PRODUCCIÓN

INTRODUCCIÓN

Los hombres se han establecido a través del tiempo para buscarle soluciones a sus inconvenientes económicos así surgen los modos de producción, los cuales son la forma en que los hombres se organizan para producir, distribuir y consumir los bienes que satisfacen sus necesidades, también se definen como la interrelación lógica entre las fuerzas productivas (fuerza de trabajo y medios de producción) y las relaciones sociales de producción que se dan en determinadas épocas históricas entre los hombres en el proceso de producción.

Las diferentes formas de producción por los que ha atravesado la historia socioeconómica del ser humano se estudian a través de la historia económica y la cual divide los modos de producción en seis grandes sistemas: comunidad primitiva, modo de producción asiático, esclavismo, feudalismo, capitalismo y socialismo. Cada uno de éstos medios de producción ha ido evolucionado del anterior, a su vez con ideas, creencias y conceptos diferentes de la economía tratando de buscar el mayor rendimiento y beneficio del hombre y la sociedad en general, este proceso se llama transición de un sistema a otro, por lo que siempre en su estudio van de la mano.

A continuación, un estudio objetivo y sintético de los diferentes modos de producción, cada uno partiendo con ideas propias, características, aportes y componentes que lo hacen a su vez diferente.

COMUNIDAD PRIMITIVA:

La comunidad primitiva es precisamente la primera forma en que los hombres se organizan para satisfacer sus necesidades. La comunidad primitiva surge con el hombre mismo. Cuando comienza a desarrollarse la sociedad, también aparece la comunidad primitiva que va a durar miles de años, hasta que los hombres desarrollan sus fuerzas productivas y sus relaciones sociales de producción. En un principio el hombre fue nómada porque dependía directamente de lo que la naturaleza le proporcionaba.
La estructura económica de la comunidad primitiva era atrasada y primitiva, como los hombres todavía no dominaban la naturaleza, dependía mucho de ella. En esta sociedad de comunidad primitiva existía propiedad colectiva de los medios de producción, por lo que el trabajo también era comunitario. Todo esto trajo como consecuencia la distribución comunitaria de los bienes. En estas comunidades tampoco existía las clases sociales, por lo que las relaciones sociales de producción son relaciones de cooperación y ayuda mutua, relaciones armónicas, donde no había la explotación del hombre por el hombre.

Estos primeros hombres producen apenas lo necesario para la satisfacer las necesidades de la sociedad; llamada sociedad de autoconsumo o autosubsistencia; por lo que no se produce excedente económico.

Sus instrumentos de producción van desde piedras en estado natural, tallada, pulida, y luego utilizan los metales (cobre, bronce, hierro, etc.) hasta llegar a elaborar hachas, cuchillos, etc. Al mejorarse los instrumentos de producción se crea una división natural del trabajo, determinado por el sexo y la edad.

Esta sociedad sigue desarrollándose hasta que aparece la primera división social del trabajo: los que se dedicaban a la caza y pesca y los que se dedican a la agricultura y pastoreo, sin embargo esta división aumentó la producción y la productividad. Con la creación de vasijas de barro para el agua nace la segunda división del trabajo. Continua su desarrollo, se va produciendo más de lo que se necesita, y así se crea el excedente económico, lo que hará posible el intercambio o trueque surgiendo así los mercaderes, lo que representa la tercera división del trabajo. La propiedad colectiva de los medios de producción va evolucionando y pasa de la propiedad colectiva a la familiar, llegando a la propiedad privada.

Al surgir el excedente económico la comunidad primitiva se apropia de el y lo intercambian. Nacen así las clases sociales, lo que representa el periodo de transición de la comunidad primitiva al esclavismo.

MODO DE PRODUCCIÓN ASIÁTICO:

Este modo de producción fue el desarrollado en algunas regiones de Asia (Egipto, Persia, etc.) a consecuencia de la desintegración del régimen de comunidad primitiva. Era también llamado régimen despótico-tributario.

En las comunidades que vivieron bajo el modo asiático de producción se da la propiedad común de la tierra y otros instrumentos de producción.

CARACTERISTICAS DEL MODO DE PRODUCCIÓN ASIÁTICO:

• Existe la explotación del hombre por el hombre.
• Existe una clase dominante.
• Está ligado a formas de producción más desarrolladas: agricultura, ganadería, uso de los metales, etc.
• Explotación colectiva de comunidades a otras: esta explotación se debe a la guerra, la comunidad vencedora explota a la vencida por medio del pago de tributos o esclavizando a sus miembros para que trabajen las tierras de los vencedores, pero este esclavo trabaja las tierras de la comunidad no de alguien en especial.

En este modo de producción existe un soberano, quien representa toda la comunidad y se encarga de cobrar los tributos y exacciones a las comunidades sometidas, éste recibía el nombre de déspota, de aquí el nombre régimen despótico tributario.

EL ESCLAVISMO:

Desintegrada la sociedad de comunidad primitiva, las fuerzas productivas crean las condiciones para que se modifiquen las viejas relaciones sociales de producción. Ello da origen a una nueva organización social con rasgos propios conocido como esclavismo. En el esclavismo aparece y se desarrolla la propiedad privada de los medios de producción. La propiedad se da sobre el producto total y sobre el propio productor o esclavismo.

Con el esclavismo aparecen dos clases sociales fundamentales y antagónicas: los esclavistas que son los dueños de los medios de producción y los esclavos que son los trabajadores. La aparición de estas clases sociales se debe a la producción y el desarrollo del excedente económico del cual se apropia una clase social, convirtiéndose en poseedora de los medios de producción, ésta apropiación permite el aumento de la producción y la productividad.

La base de la producción es el esclavo que realiza las actividades productivas. La existencia de esclavos que se dedican a las labores productivas, permite la existencia de ciertas clases que cultivan la filosofía, astronomía, matemáticas, etc., floreciendo así la cultura.

Entre las fuerzas productivas que desarrollan la producción esclavista se encuentran: el desarrollo de la agricultura en Egipto alcanzó muy altos niveles, con nuevos cultivos de trigo, avena, etc.; de igual forma la construcción, ganadería, la notable utilización de piedras preciosas como rubíes y diamantes, y el sistema de riego fueron muy importantes en la época.

El comercio se desarrolló ampliamente en el esclavismo, apareciendo un grupo de gente que se dedica a ésta actividad llamados mercaderes, apareció y se desarrollo la moneda que facilita el intercambio de productos. Las relaciones sociales de producción esclava fueron de explotación, basadas en la propiedad privada de los medios de producción.

La sociedad esclavista alcanzó su máximo esplendor en Grecia y luego en el Imperio Romano.

El trabajo de los esclavos no era altamente productivo debido al desinterés, pues nada le pertenecía, se requería de una alta cantidad de esclavos para que fuera rentable su explotación, así surgen las rebeliones de esclavos quienes no estaban de acuerdo con el trabajo forzoso. En esta etapa se da el periodo de transición del esclavismo al feudalismo.

Muchos de los esclavos fueron liberados, repartiéndoseles las tierras para que la cultivasen a cambio de tributos. Estos esclavos liberados eran los colonos o antecesores de los siervos feudales.

La desintegración del esclavismo se debe a dos causas principales: la descomposición interna del régimen esclavista por sus contradicciones y la invasión de los pueblos bárbaros al Imperio Romano. Estos elementos traen como consecuencia la implantación del modo de producción feudal.

Los jefes militares de los pueblos conquistados fueron repartiendo la tierra a sus súbditos reales. Muchos pequeños campesinos libres se fueron reuniendo alrededor de un gran señor para que les diera protección; surgen así dos instituciones fundamentales del desarrollo feudal:

El feudo, es una porción de tierras más o menos amplia que le pertenece hereditariamente a un señor a cambio de que le preste servicios militares al rey o los jefes militares de más alta jerarquía.

La servidumbre es la forma que asumen las relaciones sociales de producción durante el feudalismo. Se basa en la existencia de dos clases fundamentales y antagónicas: señores feudales (dueños de los principales medios de producción) y los siervos (dueños de los instrumentos de labranza)

La servidumbre es una relación diferente al esclavismo, el siervo no es un hombre completamente libre pero tampoco es un esclavo, el siervo está sujeto a las tierras y cuando éstas pasan a propiedad de otro feudal, los siervos siguen en sus tierras; la servidumbre implica una relación de explotación, la forma que ésta asume en el feudalismo es la renta de la tierra que se da en tres formas: en especie, en trabajo y en dinero.

EL FEUDALISMO:

El feudalismo es un sistema contractual de relaciones políticas y militares entre los miembros de la nobleza de Europa occidental durante la alta edad media. El feudalismo se caracterizó por la concesión de feudos (casi siempre en forma de tierras y trabajo) a cambio de una prestación política y militar, contrato sellado por un juramento de homenaje y fidelidad. Tanto el señor como el vasallo eran hombres libres.
El feudalismo unía la prestación política y militar a la posesión de tierras con el propósito de preservar a la Europa medieval de su desintegración en innumerables señoríos independientes tras el hundimiento del Imperio Carolingio. Este era un sistema natural y cerrado: donde se producía para satisfacer las necesidades del feudo, no para negociar o comerciar.
El sistema feudal se inicia cuando los caballos de guerra eran costosos y su adiestramiento para emplearlos militarmente exigía años de práctica. Carlos Martel, con el fin de ayudar a su tropa de caballería, le otorgó fincas (explotadas por braceros) que tomó de las posesiones de la Iglesia. Estas tierras, denominadas `beneficios', eran cedidas mientras durara la prestación de los soldados. Éstos, a su vez, fueron llamados `vasallos' (sirviente). Sin embargo, los vasallos, soldados selectos de los que los gobernantes Carolingios se rodeaban, se convirtieron en modelos para aquellos nobles que seguían a la corte.
Con la desintegración del Imperio Carolingio en el siglo IX muchos personajes poderosos se esforzaron por constituir sus propios grupos de vasallos dotados de montura, a los que ofrecían beneficios a cambio de su servicio. Algunos de los hacendados más pobres se vieron obligados a aceptar el vasallaje y ceder sus tierras al señorío de los más poderosos, recibiendo a cambio los beneficios feudales. Se esperaba que los grandes señores protegieran a los vasallos de la misma forma que se esperaba que los vasallos sirvieran a sus señores.
La guerra fue endémica durante toda la época feudal, pero el feudalismo no provocó esta situación; al contrario, la guerra originó el feudalismo. Tampoco el feudalismo fue responsable del colapso del Imperio Carolingio, más bien el fracaso de éste hizo necesaria la existencia del régimen feudal. El Imperio Carolingio se hundió porque estaba basado en la autoridad de una sola persona y no estaba dotado de instituciones lo suficientemente desarrolladas.
La desaparición del Imperio amenazó con sumir a Europa en una situación de anarquía: cientos de señores individuales gobernaban a sus pueblos con completa independencia respecto de cualquier autoridad soberana. Los vínculos feudales devolvieron cierta unidad, dentro de la cual los señores renunciaban a parte de su libertad, lo que era necesario para lograr una cooperación eficaz. Bajo la dirección de sus señores feudales, los vasallos pudieron defenderse de sus enemigos, y más tarde crear principados feudales de cierta importancia y complejidad. Una vez que el feudalismo demostró su utilidad local reyes y emperadores lo adoptaron para fortalecer sus monarquías.

CARACTERISTICAS DEL FEUDALISMO:

• En el feudalismo no se producían mercancías, por lo que casi no se desarrolla en comercio en esta época.
• Las ciudades surgen cuando se desarrollan los burgos a orillas de los feudos.
• La producción artesanal de los burgos se realiza en los talleres artesanales.
• La actividad principal era la agricultura.
• El comercio está organizado en gildas y los oficios en gremios.

La desaparición de las formas feudales da paso al modo de producción capitalista.

EL CAPITALISMO:

La ampliación de la producción y productividad en los centros artesanales: los burgos, antecedentes de las ciudades, el desarrollo del capital comercial que concentra recursos para ampliar la producción y el comercio, las revoluciones burguesas que acabaron con el poder de los señores feudales instaurando la burguesía y los descubrimientos geográficos fueron parte de los cambios que favorecieron el traspaso del feudalismo al capitalismo.
El capitalismo es sistema económico en el que los individuos privados y las empresas de negocios llevan a cabo la producción y el intercambio de bienes y servicios mediante complejas transacciones en las que intervienen los precios y los mercados. Aunque tiene sus orígenes en la antigüedad, el desarrollo del capitalismo es un fenómeno europeo; fue evolucionando en distintas etapas, hasta considerarse establecido en la segunda mitad del siglo XIX. Desde Europa, y en concreto desde Inglaterra, el sistema capitalista se fue extendiendo a todo el mundo, siendo el sistema socio-económico casi exclusivo en el ámbito mundial hasta el estallido de la I Guerra Mundial, tras la cual se estableció un nuevo sistema socio-económico, el comunismo, que se convirtió en el opuesto al capitalista.

El capitalismo son sistema de libre empresa y economía de mercado, que se utilizan para referirse a aquellos sistemas socio-económicos no comunistas. Algunas veces se utiliza el término economía mixta para describir el sistema capitalista con intervención del sector público que predomina en casi todas las economías de los países industrializados.
Se puede decir que, de existir un fundador del sistema capitalista, éste es el filósofo escocés Adam Smith, que fue el primero en describir los principios económicos básicos que definen al capitalismo. En su obra clásica Investigación sobre la naturaleza y causas de la riqueza de las naciones (1776), Smith intentó demostrar que era posible buscar la ganancia personal de forma que no sólo se pudiera alcanzar el objetivo individual sino también la mejora de la sociedad. Los intereses sociales radican en lograr el máximo nivel de producción de los bienes que la gente desea poseer.
Con una frase que se ha hecho famosa, Smith decía que la combinación del interés personal, la propiedad y la competencia entre vendedores en el mercado llevaría a los productores, "gracias a una mano invisible", a alcanzar un objetivo que no habían buscado de manera consciente: el bienestar de la sociedad.
Tanto los mercaderes como el comercio existen desde que existe la civilización, pero el capitalismo como sistema económico no apareció hasta el siglo XIII en Europa sustituyendo al feudalismo. Según Adam Smith, los seres humanos siempre han tenido una fuerte tendencia a "realizar trueques, cambios e intercambios de unas cosas por otras". Este impulso natural hacia el comercio y el intercambio fue acentuado y fomentado por las Cruzadas que se organizaron en Europa occidental desde el siglo XI hasta el siglo XIII.
Las grandes travesías y expediciones de los siglos XV y XVI reforzaron estas tendencias y fomentaron el comercio, sobre todo tras el descubrimiento del Nuevo Mundo y la entrada en Europa de ingentes cantidades de metales preciosos provenientes de aquellas tierras. El orden económico resultante de estos acontecimientos fue un sistema en el que predominaba lo comercial o mercantil, es decir, cuyo objetivo principal consistía en intercambiar bienes y no en producirlos. La importancia de la producción no se hizo patente hasta la Revolución industrial que tuvo lugar en el siglo XIX.
Sin embargo, ya antes del inicio de la industrialización había aparecido una de las figuras más características del capitalismo, el empresario. Un elemento clave del capitalismo es la iniciación de una actividad con el fin de obtener beneficios en el futuro; puesto que éste es desconocido, tanto la posibilidad de obtener ganancias como el riesgo de incurrir en pérdidas son dos resultados posibles, por lo que el papel del empresario consiste en asumir el riesgo de tener pérdidas.
El camino hacia el capitalismo a partir del siglo XIII fue allanado gracias a la filosofía del renacimiento y de la Reforma. Estos movimientos cambiaron de forma drástica la sociedad, facilitando la aparición de los modernos Estados nacionales que proporcionaron las condiciones necesarias para el crecimiento y desarrollo del capitalismo.
Este crecimiento fue posible gracias a la acumulación del excedente económico que generaba el empresario privado y a la reinversión de este excedente para generar mayor crecimiento.
La producción generalizada de mercancías es una condición indispensable para el desarrollo del capitalismo. Ésta producción ha tenido 3 formas históricos-básicas: producción mercantil simple (producción basada en la propiedad privada y el trabajo personal), la manufactura (producción hecha a mano) y producción maquinizadas (los trabajadores se dedican a un solo proceso), la operación repetitiva del trabajador y de las herramientas trae como consecuencia la maquina que se encarga precisamente de realizar dichas operaciones repetitivas, su desarrollo se dio a partir de la Revolución Industrial. La máquina ha seguido su evolución hasta llegar a su automatización y la computarización.

CARACTERISTICAS DEL CAPITALISMO:

• Existencia de la propiedad privada en los medios de producción.
• Desarrollo económico de la cuidad y del campo es desigual.
• Existencia de una anarquía de producción porque cada capitalista decide que, cuanto y donde producir e invertir.
• Existencia de dos clases sociales fundamentales y antagónicas: la burguesía y el proletariado, de la relación de ambas clases surge y se desarrolla el capital de los burgueses.
• En el capitalismo existe la producción de mercancías dando lugar al desarrollo del comercio.
• La anarquía de la producción produce crisis periódicas.
El sistema capitalista ha atravesado dos faces históricas: premonopolista o de libre competencia, la cual se basa en la competencia entre los capitalistas y cuyas formas de producción de mercancías fueron la producción mercantil simple y manufactura e imperialismo o monopolista el cual era llamado fase superior del capitalismo, es el capitalismo en la fase de desarrollo en la cual ha tomado cuerpo la dominación de los monopolios y del capital financiero.

IMPERIALISMO:

Ésta doctrina es una de las fases históricas en las que se manifiesta el capitalismo. El imperialismo es la práctica de dominación empleada por las naciones o pueblos poderosos para ampliar y mantener su control o influencia sobre naciones o pueblos más débiles; El imperialismo tiene un sentido más amplio que el colonialismo pues remite al control o influencia ejercido sobre otra región, sea o no de forma oficial y directa, e independientemente de que afecte al terreno económico o político. Lenin lo llamaba fase superior del capitalismo.
Los rasgos del imperialismo fueron: la concentración de la producción y del capital creando los monopolios, la fusión del capital bancario con el industrial y la creación de la oligarquía financiera, la exportación de capital, la terminación del reparto territorial del mundo entre las potencias capitalistas más importantes y la formación de asociaciones capitalistas. El imperialismo es una forma de dominación de unos países sobre otros.
En el capitalismo la intervención del Estado en la economía por medio de la política económica es fundamental para tratar de detener las crisis que afectan al sistema, éste sistema fue evolucionando hasta llegar:
Capitalismo de Estado: es la intervención directa del Estado en la economía a través de múltiples modalidades, y cuya función principal es la protección del capital en general.
Capitalismo monopolista de Estado: éste es cuando el capitalismo monopolista se ha desarrollado y los monopolios dominan la vida económica. Es la intervención directa del Estado en la economía en la fase del capitalismo monopolista o imperialista. Es la fusión de monopolios privados con monopolios estatales.

EL SOCIALISMO:

El socialismo es el modo de producción que se desarrolló en el siglo XX, el cual designa aquellas teorías y acciones políticas que defienden un sistema económico y político basado en la socialización de los sistemas de producción y en el control estatal (parcial o completo) de los sectores económicos, lo que se oponía frontalmente a los principios del capitalismo.
Aunque el objetivo final de los socialistas era establecer una sociedad comunista o sin clases, se han centrado cada vez más en reformas sociales realizadas en el seno del capitalismo. A medida que el movimiento evolucionó y creció, el concepto de socialismo fue adquiriendo diversos significados en función del lugar y la época donde arraigara.

Los pensadores se oponían al capitalismo por razones éticas y prácticas. Según ellos, el capitalismo constituía una injusticia: explotaba a los trabajadores, los degradaba, transformándolos en máquinas o bestias, y permitía a los ricos incrementar sus rentas y fortunas aún más mientras los trabajadores se hundían en la miseria. Mantenían también que el capitalismo era un sistema ineficaz e irracional para desarrollar las fuerzas productivas de la sociedad, que atravesaba crisis cíclicas causadas por periodos de superproducción o escasez de consumo, no proporcionaba trabajo a toda la población (con lo que permitía que los recursos humanos no fueran aprovechados o quedaran infrautilizados) y generaba lujos, en vez de satisfacer necesidades. Los socialistas compartían con los liberales el compromiso con la idea de progreso y la abolición de los privilegios aristocráticos aunque, a diferencia de ellos, denunciaban al liberalismo por considerarlo una fachada tras la que la avaricia capitalista podía florecer sin obstáculos.
En 1917 surgió la primera nación que se desarrolló bajo éste modo de producción: la URSS (Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas).

Entre las características del modo productivo socialista están:

• Existe planificación central de la producción, desapareciendo la anarquía del capitalismo.
• En el socialismo no hay crisis económicas, por la planificación de acuerdo a las necesidades.
• Existen diferencias sociales aunque ya no son antagónicas. En el socialismo se produce satisfactores y dejan de producir mercancías.
• Busca la satisfacción de las necesidades sociales y no la obtención de ganancias.La planificación elimina el desempleo y la inflación.
Los cambios y apertura de los países socialistas se destacan en algunos cambios como: los precios se rigen por la oferta y la demanda, fomento a la inversión privada incluyendo la inversión extranjera y el desarrollo de la propiedad privada sobre los medios de producción.

viernes, 12 de marzo de 2010

CIENCIA Y PSEUDOCIENCIA

Acerca de las ideas de verdad y error, falsabilidad y pluralismo crítico, en Karl Popper ( Viena 28 de Julio de 1902. Murió el 17 de Septiembre de 1994).
¨Popper no fue un inventor: Ha trascendido porque tuvo el sentido de la oportunidad suficiente para lanzarse contra la corriente de su época y elaborar una suerte de teoría de la verdad y la tolerancia en tiempos de intolerancia y mentira.
Fundamentó sus tesis en la idea de acercamiento a la verdad y alejamiento del error por medio de la falsabilidad. Su distinción ente ciencia y seudociencia causó natural escozor entre los dogmáticos de todos los frentes: Es seudocientífica una idea cuando se apoye en afirmaciones que se juzgan categóricas, definitivas e incuestionables. ¨Una teoría que no es refutable por ningún suceso concebible (dijo), no es científica¨. En consecuencia, concluyó que la irrefutabilidad no es una virtud de una teoría, como suele creerse, sino, por el contrario, un vicio.
La responsabilidad del hombre de ciencia consiste en exponer sus tesis a condiciones límites, a experimentos en los que se pusieran a prueba afirmaciones que se han creído definitivas. Defensor persistente del pluralismo crítico, retomó las lecciones de los maestros que a lo largo de la historia de la filosofía han enseñado a despojar las ideas de la ciencia de rigidez excesiva y de formalismo innecesario. La sinonimia entre hipótesis y conjetura quedó resaltada en su crítica a todos aquellos que han querido atribuirle a lo científico un carácter de certeza absoluta, cuando las ideas deben circular con libertad y provisionalidad, como aproximaciones sucesivas y continuas a la verdad, mas no como la verdad misma. Lo científico, según Popper, no puede sostenerse si no puede ser refutado, puesto que ¨lo que no es refutable tiene que ver con la magia o la mística¨.
Para Popper, la tarea del sabio debería consistir no tanto en demostrar la fortaleza de una teoría, sino más bien en someterla a una crítica tan rigurosa, tan implacable, que incluso pueda llegar a destruirla mediante la multiplicación de los experimentos dirigidos a establecer su falsedad. Y sólo en el momento en que la teoría supere todas las pruebas posibles podría llegar a calificársele de verdadera, pero con la condición de que en cualquier instante pueda llegar a ser sustituida gracias a la sucesión de pruebas, verificaciones y búsqueda de errores.
Popper fue un crítico de las ideologías. En su obra más conocida ¨La sociedad abierta y sus enemigos¨, cuestionó a Platón, Marx y Hegel. A los tres los puso contra la pared y los acusó de ser los enemigos de la sociedad abierta, como fabricantes de ideologías, que suprimen la capacidad de reflexionar. Por eso llegó a sostener que los ideólogos han obtenido éxito al hacerles creer a los espíritus sencillos que el mundo puede comprenderse repitiendo fórmulas rituales envueltas en un aire vagamente científico.
La aportación más valiosa de Popper, desde el punto de vista ético, se centra en su concepto de búsqueda de la verdad y el sentido con espíritu de tolerancia y con una aceptación constante de la otredad o alteridad racional, en cuanto a que el interlocutor también pueda tener razón.¨ (Tomado de Literario Dominical, 17-03-02 y escrito por Juan José García Posada. Página 2-3)
¨Sencillamente no hay vuelta atrás. Nos guste o no, estamos atados a la ciencia. Lo mejor sería sacarle el máximo provecho.(…)
Pero la superstición y la pseudociencia no dejan de interponerse en el camino para distraer, proporcionando respuestas fáciles, evitando el escrutinio escéptico, apelando a nuestros temores y devaluando la experiencia, convirtiéndonos en practicantes rutinarios y cómodos además de víctimas de la credulidad. Sí, el mundo sería más interesante si hubiera ovnis al acecho en las aguas profundas de las Bermudas tragándose barcos y aviones, o si los muertos pudieran hacerse con el control de nuestras manos y escribirnos mensajes. Sería fascinante que los adolescentes fueran capaces de hacer saltar el auricular del teléfono de su horquilla sólo con el pensamiento, o que nuestros sueños pudieran predecir acertadamente el futuro con mayor asiduidad que lo que puede explicarse por la casualidad y nuestro conocimiento del mundo.
Todos esos son ejemplos de pseudociencia. Pretenden utilizar métodos y descubrimientos de la ciencia, mientras que en realidad son desleales a su naturaleza, a menudo porque se basan en pruebas insuficientes o porque ignoran claves que apuntan en otra dirección. Están infestados de credulidad. Con la cooperación desinformada de periódicos, revistas, editores, radio, televisión, productores de cine y similares, esas ideas se encuentran fácilmente en todas partes.
La pseudociencia es más fácil de inventar que la ciencia, porque hay una mayor disposición a evitar confrontaciones perturbadoras con la realidad que no permiten controlar el resultado con la comparación. Los niveles de argumentación, son mucho más relajados. En parte es mucho más fácil presentar al público en general la pseudociencia que la ciencia.
La pseudociencia colma necesidades emocionales poderosas que la ciencia suele dejar insatisfechas. Proporciona fantasías sobre poderes personales que nos faltan y anhelamos. En algunas de sus manifestaciones ofrece una satisfacción del hambre espiritual, la curación de las enfermedades, la promesa de que la muerte no es el fin.
En el corazón de alguna pseudociencia se encuentra la idea de que el deseo lo convierte casi todo en realidad.¨ (Carl Sagan. El Mundo y sus demonios. Bogotá, Planeta, 1997.)
Amigo Estudiante: Según lo leído en el texto anterior, responda las preguntas siguientes:
1. ¿En qué consiste la teoría de la falsabilidad?
2. Según Karl Popper, ¿Qué es la Sociedad Abierta?
3. ¿Cuál es el gran aporte de Popper, en lo ético? Explique.
4. Explique la diferencia entre Ciencia y Pseudociencia, según Carl Sagan.
5. Cuál es el método que sigue la ciencia (defina y explique brevemente).
6. ¿Qué tiene que ver la verdad, la tolerancia, la otredad con la ciencia y sus métodos.
7. Exprese su opinión del siguiente fragmento: ¨ Sí, el mundo sería más interesante si hubiera ovnis al acecho en las aguas profundas de las Bermudas tragándose barcos y aviones, o si los muertos pudieran hacerse con el control de nuestras manos y escribirnos mensajes. Sería fascinante que los adolescentes fueran capaces de hacer saltar el auricular del teléfono de su horquilla solo con el pensamiento, o que nuestros sueños pudieran predecir acertadamente el futuro con mayor asiduidad que lo que puede explicarse por la causalidad y nuestro conocimiento del mundo.¨

domingo, 28 de febrero de 2010

ESENCIA DEL CONOCIMIENTO

¿Es el objeto el que determina al sujeto, o el sujeto al objeto? Es la cuestión de la ESENCIA DEL CONOCIMIENTO (El Objetivismo. El Subjetivismo. El Realismo. El Idealismo. El fenomenalismo).

LA ESENCIA DEL CONOCIMIENTO: El conocimiento representa una relación entre un sujeto y un objeto. El verdadero problema del conocimiento consiste, por tanto, en el problema de la relación entre el sujeto y el objeto.
Hemos visto que el conocimiento se representa a la conciencia natural como una determinación del sujeto por el objeto. Pero ¿No debemos hablar, a la inversa, de una determinación del objeto por el sujeto en el conocimiento? ¿Cuál es el factor determinante en el conocimiento humano? ¿Tiene éste su centro de gravedad en el sujeto o en el objeto?

Veamos las distintas posiciones al respecto:

El Objetivismo: Según éste, el objeto es el decisivo entre los dos miembros de la relación cognoscitiva. El objeto determina al sujeto. Éste ha de regirse por aquél. El sujeto toma sobre sí en cierto modo las propiedades del objeto, las reproduce. Esto supone que el objeto hace frente como algo acabado, algo definido a la conciencia cognoscente. Esta es la idea central del objetivismo. Según él, los objetos son algo dado, algo que presenta una estructura que es reconstruida por la conciencia cognoscente.

Para el objetivismo, el centro de gravedad del conocimiento reside en el objeto; el reino objetivo de las Ideas o esencias es, por decirlo así, el fundamento sobre el que descansa el edificio del conocimiento.

El Subjetivismo: Trata de fundar el conocimiento humano en el sujeto. Para ello coloca el mundo de las Ideas, de las esencias, el conjunto de los principios del conocimiento, en el sujeto. En éste radica la verdad del conocimiento. Pero téngase en cuenta que con el sujeto no se quiere significar el sujeto concreto, individual, del pensamiento, sino un sujeto superior, trascendente.

Lo peculiar del conocimiento ya no consiste en enfrentarse con un mundo objetivo, sino en volverse hacia aquel sujeto supremo. De él, no del objeto, recibe la conciencia cognoscente sus contenidos. Por medio de estos supremos contenidos, de estos principios y conceptos generales, levanta la razón el edificio del conocimiento (San Agustín). El conocimiento se halla fundado, por ende, en lo absoluto, en Dios.

Esta concepción también la encontramos en la filosofía moderna (el neokantismo): la idea central del subjetivismo se presenta aquí despojada de todos los accesorios metafísicos y psicológicos (escuela de Marburgo): El sujeto, en quien el conocimiento aparece fundado en último término, no es un sujeto metafísico, sino puramente lógico. Se significa con esto el conjunto de las leyes y los conceptos supremos de nuestro conocimiento. Éstos son los medios merced a los cuales la conciencia cognoscente define los objetos. Esta definición es concebida como una producción del objeto. No hay objetos independientes de la conciencia, sino que todos los objetos son engendros de ésta, productos del pensamiento.

Sólo hay un ser conceptual, mental, no un ser real, independiente del pensamiento (es un riguroso idealismo).

El Realismo: es aquella posición epistemológica según la cual, hay cosas reales, independientes de la conciencia.

En el realismo ingenuo, las cosas nos son dadas como producto o contenidos de la percepción. Identifica los contenidos de la percepción, con los objetos. Las cosas son, según el realismo, exactamente como las percibimos.

El realismo natural, está influido por reflexiones críticas sobre el conocimiento. Ya no identifica el contenido de la percepción con el objeto, sino que distingue el uno del otro.

El realismo crítico: no cree que convengan a las cosas todas las propiedades encerradas en los contenidos de la percepción, sino que es, por el contrario, de opinión que todas las propiedades o cualidades de las cosas que percibimos sólo por un sentido como los colores, los sonidos, los olores, etc., únicamente existen en nuestra conciencia. Estas cualidades surgen cuando determinados estímulos externos, actúan sobre nuestros órganos sensoriales. No tienen, pues, carácter objetivo, sino subjetivo. Es menester, sin embargo, suponer en las cosas ciertos elementos objetivos y causales para explicar la aparición de estas cualidades. El hecho de que la sangre nos parezca roja y el azúcar dulce, ha de estar fundado en la naturaleza de estos objetos.

El Idealismo: Éste sustenta la tesis de que no hay cosas reales independientes de la conciencia. Se divide en:

El idealismo subjetivo o psicológico: las cosas no son nada más que contenidos de la conciencia. Todo su ser consiste en ser percibidas por nosotros, en ser contenidos de nuestra conciencia. Tan pronto como dejan de sr percibidas por nosotros, dejan también de existir. No poseen un ser independiente de nuestra conciencia. Nuestra conciencia con sus varios contenidos, es lo único real.

El idealismo objetivo: los objetos del conocimiento existen (engendrados) como producto del pensamiento. Mientras el idealismo subjetivo ve en el objeto del conocimiento algo psicológico, un contenido de conciencia (y el realismo lo considera como algo real, como un contenido parcial del mundo exterior), el idealismo lógico lo tiene por algo lógico, por un producto del pensamiento.

Veamos un ejemplo: cogemos un pedazo de yeso. Para el realista existe el yeso fuera e independientemente de nuestra conciencia. Para el idealista subjetivo el yeso existe sólo en nuestra conciencia. Su ser entero consiste en que lo percibimos. Para el idealista lógico el objeto yeso no existe ni en nosotros ni fuera de nosotros; no existe pura y simplemente, sino que necesita ser engendrado. Pero tiene lugar por obra de nuestro pensamiento. Formando el concepto de yeso, engendra nuestro pensamiento el objeto yeso. Para el idealista lógico, el yeso no es un objeto real ni un ser consciente, sino un ser lógico – ideal (¨El ser no descansa en sí mismo; el pensamiento es quien lo hace surgir¨. Escuela de Marburgo).
Para ambos idealismos, el objeto del conocimiento no es nada real, sino algo ideal.

El fenomenalismo: es un intento de reconciliación entre el realismo y el idealismo (Kant).

El fenomenalismo (fenómeno, apariencia) es la teoría según la cual, no conocemos las cosas como son en sí, sino como nos aparecen. Para el fenomenalismo hay cosas reales, pero no podemos conocer su esencia. Sólo podemos saber que las cosas son, pero no ¨lo que son¨.

El fenomenalismo coincide con el realismo en admitir cosas reales; pero coincide con el idealismo en limitar el conocimiento a la conciencia, al mundo de la apariencia, de lo cual resulta inmediatamente la incognoscibilidad de las cosas en sí.

Cuando concebimos el mundo como compuesto de cosas que están dotadas de propiedades, o sea, cuando aplicamos a los fenómenos el concepto de sustancia; o cuando consideramos ciertos procesos como producidos por una causa, esto es, cuando aplicamos el concepto de causalidad; o cuando hablamos de la realidad, la posibilidad, la necesidad, todo esto se funda, en opinión del fenomenalismo, en ciertas formas y funciones a priori del entendimiento, las cuales excitadas por las sensaciones, entran en acción independientemente de nuestra voluntad. Los conceptos supremos o las categorías que aplicamos a los fenómenos, no representan por consiguiente, propiedades objetivas de las cosas, sino que son formas lógicas subjetivas de nuestro entendimiento, el cual ordena con su ayuda los fenómenos y hace surgir de este modo ese mundo objetivo que, en opinión del hombre ingenuo, existe sin nuestra cooperación y con anterioridad a todo conocimiento.

El mundo en que vivimos es, dicho con otras palabras, un mundo formado por nuestra conciencia. Nunca podemos conocer cómo está constituido el mundo en sí, esto es, prescindiendo de nuestra conciencia y de sus formas a priori. Pues tan pronto como tratamos de conocer las cosas, las introducimos, por decirlo así, en las formas de la conciencia. Ya no tenemos pues, ante nosotros la cosa en sí, sino la cosa como se nos aparece, o sea el fenómeno.

Esta teoría fue desarrollada por Kant.

Amigo Estudiante:

Con base en la lectura anterior (esencia del conocimiento), haga un texto, tipo Ensayo, tratando de rodear argumentalmente los siguientes aspectos:
• ¿Son las cosas, como son? ¿Como las percibimos o como las pensamos? ¿Qué es la Realidad? (para un realista, para un idealista, etc.).¿Cómo transforma la realidad una postura desde el objetivismos y el subjetivismo?, etc.

martes, 23 de febrero de 2010

EVALUACIÓN PRIMERA FILOSOFÍA 11º



INSTITUCION EDUCATIVA JULIO CÉSAR GARCÍA
¨ Construyendo convivencia formamos personas con visión empresarial¨
EVALUACIÓN (1ª) PP

ÁREA: FILOSOFÍA
GRADO: 11º
FECHA: Febrero 24 de 2010

NOMBRE: ……………………………………………………………………………………Grupo: ………………
1. (Valor 2.5 puntos)
En el siguiente fragmento, la autora nos muestra el camino tortuoso del aprendizaje humano, tomando como base el mito (alegoría) de la caverna de Platón. Con base en su experiencia y razonamiento, Usted ¿qué piensa de este proceso y cuál es el papel de la filosofía en el mismo?
¨(… ) La ascensión hacia la luz, la salida de la caverna es un verdadero arrancamiento. Supone una conversión de todo nuestro ser, una renuncia al mundo, ascesis dolorosa. Deslumbramiento, ceguera, sufrimientos de todo tipo, sólo provocan al principio rebelión y resistencia, y después esfuerzos penosos, cumplidos de mala gana, en la nostalgia de una pasividad perdida. ¡Cuán penoso pueden ser el esfuerzo y la reflexión, el aprendizaje de los saberes, el alumbramiento de los primeros juicios personales, el paso del ¨se dice¨ al de ¡Yo pienso!¨ (Geneviève Droz. Los Mitos platónicos).
2. (Valor 2.5 puntos)
Haga una corta reflexión filosófica sobre el pasaje siguiente:
¨Esta alegoría plantea uno de los problemas más delicados de la filosofía platónica, el de las relaciones entre el ser y el conocimiento. Si el mundo sensible es sólo la burda copia del mundo inteligible, si la única realidad verdadera está en el bando de las Ideas, el hombre es realmente habitante de los dos mundos: sin duda puede contentarse con su caverna de ilusiones engañosas, pero también tiene la capacidad de salir y de acercarse a la verdad. La apariencia trágica de nuestra condición está compensada por un optimismo racionalista, confiando en una posible liberación del hombre mediante el conocimiento¨. (op. cit)
3. (Valor 5 puntos)
El concepto de verdad se relaciona estrechamente con la esencia del conocimiento. Verdadero conocimiento es tan sólo el conocimiento verdadero. Un ¨ conocimiento falso¨ no es propiamente conocimiento, sino error e ilusión. Más ¿en qué consiste la verdad del conocimiento? Según lo dicho, debe radicar en la concordancia de la imagen con el objeto. Un conocimiento es verdadero si su contenido concuerda con el objeto mentado.
Surge entonces, un problema de varios, como es la POSIBILIDD DEL CONOCIMIENTO HUMANO (¿puede el sujeto aprehender realmente el objeto?), al cual responden varias escuelas (posturas) filosóficas, entre ellas:
• El Dogmatismo: Es aquella posición epistemológica para la cual todavía no existe el problema del conocimiento. El dogmatismo da por supuesta la posibilidad y la realidad del contacto entre el sujeto y el objeto: la conciencia cognoscente aprehende su objeto. Esta posición se sustenta en una confianza de la razón humana, todavía no debilitada por ninguna duda.
• El Escepticismo: Según el escepticismo, el sujeto no puede aprehender el objeto. El conocimiento, en el sentido de una aprehensión real del objeto, es imposible. Por eso no debemos emitir pronunciar ningún juicio, sino abstenernos totalmente de juzgar.
• El Subjetivismo y El Relativismo: según éstos, hay una verdad: pero ésta tiene una validez limitada. No hay ninguna verdad universalmente válida. El subjetivismo, como ya lo indica su nombre, limita la validez de la verdad al sujeto que conoce y juzga. Para el relativismo, la verdad es relativa a una condición o circunstancia determinada. Tampoco tiene una validez universal.
• El Pragmatismo: Como el escepticismo, también el pragmatismo abandona el concepto de verdad en el sentido de la concordancia entre el pensamiento y el ser. Pero el pragmatismo no se detiene en esta negación, sino que remplaza el concepto abandonado por un nuevo concepto de la verdad. Según él, verdadero significa útil, valioso, fomentador de la vida.
• El Criticismo: Una posición intermedia entre el dogmatismo y el escepticismo, se llama el criticismo (examinar).
El criticismo comparte con el dogmatismo la fundamental confianza a la razón humana. Está convencido de que es posible el conocimiento, de que hay una verdad. Pero mientras esta confianza induce al dogmatismo a aceptar despreocupadamente, por decirlo, así, todas las afirmaciones de la razón humana y a no reconocer límites al poder del conocimiento humano, el criticismo, próximo en esto al escepticismo, une a la confianza en el conocimiento humano, en general, la desconfianza hacia todo conocimiento determinado. El criticismo examina todas las afirmaciones de la razón humana y no acepta nada despreocupadamente. Dondequiera pregunta por los motivos y pide cuentas a la razón humana.
Según lo anterior, analice cada postura filosófica, desde el punto de vista ético y político.
NOTA: Evaluación individual con un plazo máximo de entrega: viernes 26 de febrero.

martes, 16 de febrero de 2010

POSIBILIDAD DEL CONOCIMIENTO HUMANO

¿Puede el sujeto aprehender realmente el objeto? Esta es la cuestión de la POSIBILIDAD DEL CONOCIMIENTO HUMANO. (El Dogmatismo. El Escepticismo. El Subjetivismo y el Relativismo. El Pragmatismo. El Criticismo)
• El Dogmatismo: Es aquella posición epistemológica para la cual todavía no existe el problema del conocimiento. El dogmatismo da por supuesta la posibilidad y la realidad del contacto entre el sujeto y el objeto: la conciencia cognoscente aprehende su objeto. Esta posición se sustenta en una confianza de la razón humana, todavía no debilitada por ninguna duda.
El contacto entre el sujeto y el objeto no puede parecer problemático a quien no ve que el conocimiento representa una relación. No ve que el conocimiento es por esencia una relación ente el sujeto y un objeto. Cree, por el contrario, que los objetos del conocimiento nos son dados absolutamente y no meramente por obra de la función intermediaria del conocimiento.
Según la concepción del dogmatismo, los objetos de la percepción y los objetos del pensamiento nos son dados de la misma manera: directamente en su corporeidad.
También los valores existen, pura y simplemente, para el dogmático.
Como actitud de hombre ingenuo, el dogmatismo es la posición primera y más antigua. En el período originario de la filosofía griega domina de un modo casi general. Las reflexiones epistemológicas no aparecen, en general, entre los presocráticos. Estos pensadores se hallan animados todavía por una confianza ingenua en la capacidad de la razón humana. Vueltos por entero hacia el ser, hacia la naturaleza, no sienten que el conocimiento mismo es un problema. Se plantea este problema por primera vez, son los sofistas.

• El Escepticismo: ¨Los extremos se tocan¨. El dogmatismo se convierte, muchas veces, en su contrario, en el escepticismo (cavilar, examinar). Mientras aquél considera la posibilidad de un contacto entre el sujeto y el objeto, como algo comprensible de suyo, éste la niega. Según el escepticismo, el sujeto no puede aprehender el objeto. El conocimiento, en el sentido de una aprehensión real del objeto, es imposible. Por eso no debemos emitir pronunciar ningún juicio, sino abstenernos totalmente de juzgar.
Mientras el dogmatismo desconoce en cierto modo el sujeto, el escepticismo no ve el objeto. Su vista se fija en tan exclusivamente en el sujeto, en la función del conocimiento, que ignora por completo la significación del objeto. Su atención se dirige íntegramente a los factores subjetivos del conocimiento humano. Observa cómo todo conocimiento está influido por la índole del sujeto y de sus órganos de conocimiento, así como por circunstancias exteriores (medios, círculo cultural). De este modo escapa a su vista el objeto, que es, sin embargo, tan necesario para que tenga lugar el conocimiento, puesto que éste representa una relación entre un sujeto y un objeto.
El escepticismo se encuentra ante todo en la Antigüedad. Su fundador es Pirrón de Elis (360-270). Según él, no se llega a un contacto entre del sujeto y el objeto. A la conciencia cognoscente le es imposible aprehender su objeto. No hay conocimiento. De dos juicios contradictorios, el uno es, por ende, tan exactamente verdadero como el otro. Como no hay conocimiento ni juicio verdadero, Pirón recomienda la abstención de todo juicio.
El escepticismo académico, no es tan radical como este escepticismo antiguo o pirrónico. Según el escepticismo académico, es imposible un saber riguroso. No tenemos nunca la certeza de que nuestros juicios concuerden con la realidad. Nunca podemos decir, pues, que esta o aquella proposición sea verdadera; pero sí podemos afirmar que parece ser verdadera, que es probable. No hay por tanto, certeza, sino sólo probabilidad.
El escepticismo radical o absoluto se anula a sí mismo. Afirma que el conocimiento es imposible. Pero con esto expresa un conocimiento. En consecuencia, considera el conocimiento como posible de hecho y, sin embargo, afirma que es imposible. Incurre pues, en una contradicción consigo mismo.
No hay verdad ni certeza, pero sí probabilidad. No podemos tener nunca la pretensión de que nuestros juicios sean verdaderos, sino tan sólo la de que sean probables.
Por escepticismo entendemos, en primer término, efectivamente, el escepticismo general y de principio. El escepticismo metafísico es llamado habitualmente positivismo. Según esta posición, que remonta a Augusto Comte (1798-1857), debemos atenernos a lo positivamente dado, a los hechos inmediatos de la experiencia y guardarnos de toda especulación metafísica. Sólo hay conocimiento y un saber, el propio de las ciencias especiales, pero no un conocimiento y un saber filosófico – metafísico.
Por errado que el escepticismo sea, no se le puede negar cierta importancia para el desarrollo espiritual del individuo y de la humanidad. Es, en cierto modo, un fuego purificador de nuestro espíritu, que limpia éste de prejuicios y errores y le empuja a la continua comprobación de sus juicios.
En la historia de la filosofía el escepticismos e presenta como el antípoda del dogmatismo. Mientras éste llena a los pensadores e investigadores de una confianza tan bienaventurada como excesiva en la capacidad de la razón humana, aquél mantiene despierto el sentido de los problemas. El escepticismo hunde el taladrante aguijón de la duda en el pecho del filósofo, de suerte que éste no se aquieta en las soluciones dadas a los problemas, sino que se afana y lucha continuamente por nuevas y más hondas soluciones.


• El Subjetivismo y El Relativismo: según éstos, hay una verdad: pero ésta tiene una validez limitada. No hay ninguna verdad universalmente válida. El subjetivismo, como ya lo indica su nombre, limita la validez de la verdad al sujeto que conoce y juzga. Éste puede ser tanto el sujeto individual o el individuo humano como el sujeto general o el género humano. En el primer caso tenemos un subjetivismo individual; en el segundo, un subjetivismo general. Según el primero, un juicio es válido únicamente para el sujeto individual que lo formula (para los demás puede ser falso).
Para el subjetivismo general hay verdades supraindividuales, pero no verdades universalmente válidas. Ningún juicio es válido más que para el género humano.
El relativismo está emparentado con el subjetivismo. Según él, no hay tampoco ninguna verdad absoluta, ninguna verdad universalmente válida; toda verdad es relativa, tiene una sola validez limitada (la influencia del medio, del espíritu, del tiempo, la pertenencia a un círculo cultural determinado).
El Escepticismo, el Subjetivismo y el Relativismo, se encuentran ya en la antigüedad. Los representantes cásicos del subjetivismo son los sofistas.
El subjetivismo y el relativismo incurren en una contradicción análoga a la del escepticismo. Éste juzga que no hay no hay ninguna verdad, y se contradice a sí mismo.
Una verdad que no sea universalmente válida representa un sinsentido. La validez universal de la verdad está fundada en la esencia de la misma. La verdad significa la concordancia del juicio con la verdad objetiva. Si existe esa concordancia, no tiene sentido limitarla a un número determinado de individuos. Si existe, existe para todos. El dilema es: o el juicio es falso, y entonces no es válido para nadie, o es verdadero y entonces es válido para todos, es universalmente válido.
El subjetivismo y el relativismo son en el fondo, escepticismo. Pues también ellos niegan la verdad, si no directamente, como el escepticismo, indirectamente, atacando su validez universal.
• El Pragmatismo: Como el escepticismo, también el pragmatismo abandona el concepto de verdad en el sentido de la concordancia entre el pensamiento y el ser. Pero el pragmatismo no se detiene en esta negación, sino que remplaza el concepto abandonado por un nuevo concepto de la verdad. Según él, verdadero significa útil, valioso, fomentador de la vida.
Según el pragmatismo, el hombre no es en primer término un ser teórico o pensante, sino un ser práctico, un ser de voluntad y acción. Su intelecto está íntegramente al servicio de su voluntad y de su acción. El intelecto es dado al hombre, no para investigar y conocer la verdad, sino para poder orientarse en la realidad. Su verdad consiste en la congruencia de los pensamientos con los fines prácticos del hombre, en que aquellos resulten útiles y provechosos para la conducta práctica de éste. El intelecto no le ha sido dado para conocer la verdad, sino para obrar.

• El Criticismo: Una posición intermedia entre el dogmatismo y el escepticismo, se llama el criticismo (examinar).
El criticismo comparte con el dogmatismo la fundamental confianza a la razón humana. Está convencido de que es posible el conocimiento, de que hay una verdad. Pero mientras esta confianza induce al dogmatismo a aceptar despreocupadamente, por decirlo, así, todas las afirmaciones de la razón humana y a no reconocer límites al poder del conocimiento humano, el criticismo, próximo en esto al escepticismo, une a la confianza en el conocimiento humano, en general, la desconfianza hacia todo conocimiento determinado. El criticismo examina todas las afirmaciones de la razón humana y no acepta nada despreocupadamente. Dondequiera pregunta por los motivos y pide cuentas a la razón humana. Su conducta no es dogmática ni escéptica, sino reflexiva y crítica. Es un término medio entre la temeridad dogmática y la desesperación escéptica.
En la Antigüedad con Platón y Aristóteles y ente los estoicos; en Descartes y Leibniz y todavía en Locke y Hume. Sin embargo, el verdadero fundador del criticismo es Kant, cuya filosofía se llama pura y simplemente criticismo. Según él, el escepticismo y el dogmatismo, son posiciones exclusivistas. La una tiene una confianza ciega en la razón humana, la otra, una desconfianza, sin previa crítica. El criticismo supera ambos exclusivismos.
El Criticismo es ` aquel método de filosofar que consiste en investigar las fuentes de las propias afirmaciones y objeciones y las razones en que las mismas descansan, método que da la esperanza de llegar a la certeza`.
En la cuestión de la posibilidad del conocimiento, el criticismo es la única posición justa.

Preguntas a Resolver:
1. Con respecto a la POSIBILIDD DEL CONOCIMIENTO HUMANO, qué plantea El Dogmatismo?
2. Con respecto a la POSIBILIDD DEL CONOCIMIENTO HUMANO, qué plantea El Escepticismo?
3. El subjetivismo y El Relativismo, al negar la validez universal del conocimiento humano, en qué contradicción caen?
4. Si el Criticismo, es la posición justa en la posibilidad del conocimiento humano, explique por qué y cuál es su importancia.